lunes, 15 de diciembre de 2008

La tortura musical

El ejército norteamericano usa canciones de Rage Against the machine, Metallica, AC/DC, Britney Spears, Eminem e incluso Barrio Sésamo para torturar a sus presos de Guantánamo, aplicándoles sesiones de hasta 20 días consecutivos con la música a pleno volumen. Los artistas implicados han creado la plataforma Zero DB para protestar por el uso de sus melodías con estos fines.

Lo que más aterra de esta noticia es que la negativa de los músicos citados podría podría abrir las puertas a la SGAE, a fin de satisfacer las necesidades de un ejercito falto de munición musical para aplicar sus torturas.

y es que se supone que los torturadores no se bajarán las canciones del E-Mule sino que pagarán religiosamente cuanto la SGAE les solicite por los derechos de las mismas. Ya saben, "torturamos pero somos legales".

Además, en cuanto los militares prueben los efectos que sobre una mente sana puede ejercer la música de David Bisbal, Alejandro Sanz o Ramoncín, descubrirán que no hay martirio más cruel y despiadado. Y nada de 20 días. Un par de horas de David Bustamante o Enrique Iglesias bastan para que cualquier persona confiese haber matado a Jesucristo o ser Bin Laden. Todo antes que seguir soportándolos.

Por último y para redondear el negocio, siempre podrían denunciar a los torturados de tararear las canciones sin pagar por ello, o de grabar los temas ilegalmente desde sus celdas para distribuirlos después en el top manta. Así, si los torturadores no logran acusar a sus detenidos de terroristas, siempre podrán empapelarlos por un delito mucho más grave, como es la distribución libre de la música.

Lo dicho, un chollo más para la SGAE y una tortura que no desearía a nadie... excepción hecha de los torturadores y alguno de sus “amigousss”, claro.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Cuando fuimos los mejores

Loquillo y Sabino Méndez, reunidos y entrevistados por Federico Jiménez Losantos en Libertad Digital TV, coinciden con el locutor de la COPE al afirmar que Barcelona es una ciudad culturalmente muerta por culpa del nacionalismo catalán



Cuando aquel señor se coló con cara de despistado en mi despacho, hará cosa de un par de años, apenas le presté atención. Deduje que era uno de tantos tipos de Ciutadans que cada día desfilaban por la oficina- en aquel tiempo mi empresa, que no yo, trabajaba para la troupe de Albert Rivera- y le mostré el camino a la sala de reuniones.

Mi sorpresa fue mayúscula cuando poco después una compañera me “sopló” que aquel hombre era Sabino Méndez, el músico y autor de las mejores canciones de Loquillo. Jamás hubiera reconocido en ese tipo maduro, de cabellos grises y envuelto en un discreto terno, al rockero cuyos temas aun canto. Claro que el “troglodita”, al ver a ese cuarentón grueso, calvo y pulcramente ataviado que soy yo, tampoco me habría imaginado saltando y coreando sus temas. ¿Tanto hemos cambiado?

Si, claro está, pero con algunas diferencias. Yo sigo viviendo aquí, -Sabino llora por España desde Madrid, donde ahora reside- mantengo más o menos las mismas descreencias que hace 20 años -alguna más, diría- y no culpo a nadie de la transformación de mi ciudad, aunque a veces me cueste reconocerla. Lo asumo. Barcelona es una urbe que no da descanso; se renueva y reinventa cada día y yo estoy ya demasiado cansado como para seguir su ritmo.

Por ello estoy seguro de que aunque Sabino, Loquillo o Losantos borraran de un plumazo los edificios nuevos, rehabilitaran antiguos garitos y desterraran de Barcelona todos los nacionalistas catalanes sustituyéndolos por ciudadanos “no contaminados”, no resucitarían jamás aquel ambiente de la Barcelona de los 70.

Esa ciudad solo permanece ya en sus recuerdos. Y es que lo que tanto añoran, por mas que les cueste asumirlo, es el sueño de su juventud perdida.

Yo tambien, no nos engañemos, pero al menos intento no engañarme buscando fantasmas que justifiquen lo jodido que es cumplir años.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Terciopelo ardiente

Fallece el cantautor Joan Baptista Humet a los 58 años, víctima de un cáncer de estómago.

La única vez que coincidí con Joan Baptista Humet no fue en un concierto, ni en una velada cultural al uso. En concreto me percaté de su presencia entre los “uaaaiii”, “oiioooo”, "crash” y “guauooo” que Bruce Lee lanzaba a mansalva mientras le metía la del pulpo a un jovencísimo Chuck Norris en “El furor del dragón”. Joan Baptista estaba sentado a mi lado y cuando se levantó del cine creí adivinar, a través de aquellos poderosos ojos brillantes, que el cantautor había disfrutado como un niño.

Pero ni el dragón más furioso puede con la locura de la Parca
. En el día de su fallecimiento, más allá de nuestra afición al kung fu, mi recuerdo viaja hacia esas perlas de canciones que Joan Baptista nos ha legado y que jamás deberían perderse.

Les dejo con “terciopelo ardiente”, un tema que todavía me estremece. Presten atención a los preciosistas artificios musicales de Josep María Bardagí, otro de los grandes ya fallecido, con su sutil juego de guitarras, acústicas y eléctricas, balanceándose entre los arreglos de cuerda.

Descansa en paz, Joan Baptista. Vas a conocer a Bruce Lee. Y Clara, aquella muchacha abandonada en otra soledad, perderá ese mar de miedo en la mirada. Tendrá a su padre al lado.

[youtube http://www.youtube.com/watch?v=Qf-TPX222Vw&hl=es&fs=1]

jueves, 27 de noviembre de 2008

Bombay no es un paraíso. Un comentario frívolo

Aunque a fecha de hoy ni El Mundo ni la COPE ni Libertad Digital acusen aún a Gallardón, Zapatero, PRISA o Carod Rovira de la autoría de los hechos, no se descarta que, a la luz de las pruebas conseguidas por estos medios de comunicación, se de un vuelco imprevisible a la investigación que demuestre que todos estos atentados forman parte de un complot -al que tampoco sería ajeno Rajoy- para liquidar a la Presidenta de la comunidad de Madrid y futura presidenta del gobierno español.

Los hindúes, cuando sepan LA VERDAD, lo van a flipar.

No crean que me gusta hacer bromitas sobre un tema así. Les aseguro que mi frivolidad no llega a tanto, teniendo en cuenta que mientras escribo esto se enfrían los cadáveres de más de 100 inocentes, tratan de curarse 300 heridos y 60 personas siguen como rehenes.

Y sin embargo es lo que los tres medios citados -animados, entre otros dirigentes del PP, por Esperanza Aguirre- no dudaron en hacer sobre sobre nuestros muertos en el 11-M. Y sin bromas, con una frialdad tan macabra como calculada: intoxicando, mintiendo e incluso falsificando documentos y testimonios; pasando por encima de las víctimas y lanzando mierda sobre los familiares de los fallecidos, cuando no insultos directos.

Quizá dentro de unos años, cuando interpelen a algún obispo por el papel que jugó la emisora episcopal en aquella abominable mentira, responda que a veces es necesario olvidar.

Conmigo que no cuenten.

Con mis felicidades para todos los supervivientes de la tragedia, incluida Esperanza Aguirre.

martes, 25 de noviembre de 2008

El oro negro de Moscú o la incoherencia de nuestros políticos

Rajoy se opone a la entrada de la petrolera rusa Lukoil en el capital de Repsol a fin de preservar “la seguridad nacional”. Según el líder del PP: "Para nosotros la luz, la energía y la gasolina son un instrumento de supervivencia, para otros son un instrumento de poder y para hacer política. No lo vamos a aceptar"

Reconocerán que es curioso este viraje proteccionista a cargo del partido que abandera el ultraliberalismo económico en este país. Ellos mismos privatizaron Repsol y aun recordamos sus esfuerzos para dinamitar OPA de Gas Natural sobre Endesa, a la que preferían alemana antes que catalana.

Pero resulta aún más sorprendente el giro de nuestro gobierno, quien antes de ayer hablaba de gigantes energéticos españoles y ahora aplaude la toma de control de Repsol por parte de una compañía rusa.

¿Nos hemos vuelto locos, estamos ya en el “1984” de Orwel o el mundo anda del revés?

Pues no, simple interés. Al gobierno la entrada de los rusos le alivia un problemazo con Sacyr y eso basta para saltar por encima de su propia ideología. Y a la oposición le ocurre tres cuartos de lo mismo. Para torpedear al ejecutivo son capaces de quemar sus más profundas creencias.

¿El resultado? Entre los jaleos de una prensa vendida a aquellos a quien se deben y en medio de la demagogia política del “y tu más, pues anda que tú”, millones de ciudadanos pasmados.

Y es que los políticos nos toman por gilipollas. Saben que los ciudadanos hemos perdido el sentido crítico y apoyamos a una u otra formación con la misma pasión irracional del hincha de un club de fútbol: fe ciega en los colores y caña al rival. Sin importar el método o el discurso.

Yo, en este asunto de Lukoil, suscribo las palabras del PP. Y no porque lo diga Mariano -es más, creo que miente como un bellaco- sino porque soy un convencido de que los servicios públicos esenciales -agua, energía, transportes y grandes infraestructuras- exigen un control del gobierno, cuando no su intervención directa.

Si Ayer decir esto te acercaba al PSOE y hoy al PP. ¿que ocurrirá mañana? Solo los falsos dioses que inspiran a nuestros políticos lo saben, pero reconocerán que el asunto tiene bemoles.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Los piratas de Somalia y la cúpula de Barceló

Según la ONU, los piratas de Somalia se han embolsado en este último año unos 30 millones de dólares gracias al secuestro de 65 barcos.

Ante estas cifras, muchos pueden pensar que la piratería es un chollo. ¡Craso error, amigas y amigos! Tal como está la vida, ser pirata no es nada fácil. Echen números:
Mantén una tripulación, ármala, aprovisiónala, compra las naves, el combustible, los sistemas informáticos, aborda a un barco a 900 millas marinas, captura a su tripulación, fondea las naves en puerto, alimenta a los prisioneros y, sobre todo, costéate los honorarios del despacho de abogados suizo o inglés que te negocia el rescate. Y eso contando que no se tuerza la cosa y te hundan el barco o te apresen.

Lo que les digo, una ruina.

Sale más a cuenta ser artista consagrado, como Miquel Barceló. No tienes que abordar a los custodios del botín, sino que éstos vienen a ti y con la bolsa repleta. Contrato en mano ya puedes hacer lo que te salga de la punta del nabo -lo que se llama dejar fluir la sensibilidad del artista- y cuando acabas, aunque la mayoría no sepa qué es ese truño que cuelga del techo, te pagan sin rechistar 20 millones de euros por tu aportación a la alianza de civilizaciones.

Crean que desde que supe de esta noticia, mi admiración por Barceló -un tipo que siempre me ha caído bien- ha aumentado muchos enteros. ¡Eso es “arte”, maestro!

Tanto lo venero, que desde esta página propongo ya que se contrate a Miquel Barceló en el congreso de los diputados para hacer la placa de Sor Maravillas. Bono y sus beatos quedarán contentos y el resto del personal también. Total, a la monja no la reconocerá ni su madre.

Les dejo con este impagable vídeo de "el intermedio". No se lo pierdan. Solo son 15 segundos.

[youtube http://www.youtube.com/watch?v=inRgPGI5QN8&hl=es&fs=1]

martes, 18 de noviembre de 2008

¿Roberto Saviano es en realidad Daniel Sirera?


Pues no, aunque cueste creerlo, ni Don Daniel ni Don Roberto -el dialecto napolitano aun usa la palabra "Don" heredada del español- son la misma persona. Es más me atrevería a decir que el dirigente del PP es más listo que el escritor de "Gomorra": mientras Saviano aún trata de esconderse de los que le han amenazado de muerte, Sirera, tras perder su propia guerra con Alicia Sánchez Camacho, ha logrado desaparecer por completo del panorama político catalán.

¿Donde estará Daniel SIrera?
No lo se, pero yo en su lugar, con esa cara, me escondería en cualquier parte del mundo menos en Nápoles ¿Capici?

GoMORra ETA

La detención del jefe del aparato militar de ETA, Garikoitz Aspiazu, alias “Txeroki”, ha supuesto un un golpe tan duro como previsible para la organización terrorista, quien podría haber nombrado ya un sucesor.

Y es que, por desgracia, la cantera de aspirantes a asesinos sigue abierta. Una mezcla abducida e interesada de idealismo y odio empuja aún a muchos chavales, cada vez más jóvenes e inexpertos, a empuñar las armas. Pero ¿Saben bien a quien sirven?

Ayer mismo leía esto. Las negritas la he colocado yo.
En 2003, a partir de las declaraciones de un arrepentido Raffaele Sppinello, del clan Genovese, hegemónico en la ciudad y la provincia de Avellino, salió a la luz la noticia de la relación entre ETA y la Camorra. El clan Genovese es un aliado de los Cava de Quindici y de las familias casertanas. [...]

[...] Según las investigaciones de la fiscalía de Nápoles en 2003, dos etarras, los vascos José Miguel Arreta y Gracia Morillo Torres, se alojaron durante diez días en una suite de un hotel de Milán. Precio, itinerario, entrega: Se pusieron de acuerdo en todo. ETA enviaría cocaína a través de los militantes de la organización para recibir armas a cambio, reduciría constantemente el precio de la coca que se procuraba a través de sus contactos con los grupos guerrilleros colombianos y asumiría el coste y la responsabilidad del transporte de la mercancía hasta Italia: todo con tal de mantener relaciones con los cárteles de la Camorra, probablemente los únicos capaces de proporcionar arsenales enteros.
Roberto Saviano, Gomorra.

Cocaína, tráfico ilegal de armas -creadas en respetables empresas legales- y mafia. Un cóctel explosivo que obliga a reflexionar sobre si ETA, al margen o peor encima de sus escasos simpatizantes, es sólo un fin en sí mismo. Un títere que conviene mantener para garantizar grandes negocios a su costa
.
No lo descartaría. A los traficantes de drogas y de armas, les encantan los negocios bañados en sangre.

lunes, 17 de noviembre de 2008

La memoria Histórica

Nunca me ha gustado el concepto de memoria histórica y menos si se aplica a una ley. Por propia definición, la memoria siempre es histórica, pues se basa en la retención de hechos o experiencias pasadas. Y en esencia nunca es universal. Al contrario, la memoria es íntima, personal y en la mayoría de los casos intransferible a terceros -hijos, conyuges, hermanos, amigos...- que solo retendrán de nuestra memoria aquello que les interese. Porque la memoria, aun cuando se nutre de hechos comunes, los escoge de forma selectiva y los analiza subjetivamente en función del impacto emocional, cultural o ideológico que supone para cada persona.

El nieto de una víctima de Paracuellos tendrá una memoria histórica muy diferente a la de aquel a cuyo padre fusilaron en Málaga o Badajoz. E igual de pertinaz. Eso no hay ley que lo cambie. Como decía Manuel Vázquez Montalbán en su novela “El estrangulador”
Sin memoria no existimos, yo al menos no consigo existir. En mi memoria se cumplen mis deseos y cuando tengo deseos quiero que cuanto antes se conviertan en memoria para que nadie me los frustre, ni me los quite, ni me los convierta en deseos convencionales.


Sólo podemos hablar de memoria colectiva si la entendemos como la agrupación de sentimientos comunes, aun siendo heterogéneos, ante hechos concretos. Y como no existe ningún acontecimiento que haya generado jamás una adhesión o rechazo universal, al estudiar un período histórico nunca hallamos una memoria colectiva, sino varias.

Por tanto, para abordar el franquismo, por encima de la memoria, convendría apoyarse en principios universales como la justicia y los derechos humanos.

Y es que aunque la guerra supuso horror en ambos bandos, el hecho incuestionable es que el núcleo de aquel terror fue el levantamiento en armas de unos militares sediciosos, apoyados por una parte de la población, contra un gobierno legítimo. Que ese alzamiento provocó una cruenta guerra civil que ganaron los rebeldes instaurando una dictadura durante casi cuarenta años.

Reconocer hechos tan elementales no implica ni idealizar a la segunda república ni tildar de asesino o cómplice a toda persona que participara en el régimen franquista. Significa asumir nuestro pasado sin traicionar la memoria de nadie.

Sin embargo, la derecha, el clero y buena parte del poder judicial siguen defendiendo a día de hoy la amnesia como única receta para encarar este período. Una amnesia selectiva, que celebra la beatificación de los curas asesinados en la guerra civil mientras miles de personas aun no saben donde reposan los restos de sus familiares represaliados.

El resultado es que 33 años después de la muerte del dictador, la memoria histórica de los vencedores sigue imponiéndose sobre la de los vencidos. Mientras se mantenga esta situación, será imposible cerrar este funesto capítulo de nuestra historia.