Curiosas medidas para intentar frenar el éxodo de fieles hacia otras religiones, en muchos casos cristianas, pero bastante menos restrictivas en materia de jodienda, ya sea en su práctica o en lo referente al control de natalidad. Y es que es muy duro decirle a alguien, sobre todo si cree en Dios, que se pudrirá eternamente en el infierno por echar una cana al aire, tirar de condón, abortar o votar a Chavez.
Pero Ratzinger no cede. Antes de adaptar la religión a las personas, el Vaticano sigue con la vieja fórmula tratar de que sean las personas las adapten a la religión, aún obligándolas por la fuerza. Para su desgracia, la Iglesia no tiene ya la misma capacidad de decisión sobre el fiel que hace unos años. En la mayoría de los países ya no puede imponer, los gobiernos no se lo permiten. Solo les queda convencer, y así les va.
Pese a todo tampoco conviene minusvalorar su poder. Muy preocupantes resultan las declaraciones de Benedicto XVI sobre el auge del marxismo en América. Y es que ante el peligro rojo, los de la púrpura no solo se mueven, sino que no les importa pactar con el mismísimo diablo.
Ayer mismo leí –en un libro no muy riguroso, todo hay que decirlo- que la Teoría de la Liberación fue defenestrada con la inestimable ayuda de la CIA. Es posible. Mucho más documentado está la cantidad de dinero procedente del narcotráfico y la prostitución que la Mafia italiana aportó a Juan Pablo II –ese al que ahora quieren hacer santo- para acabar con el comunismo en Polonia y otros países del Este.
Pues bien, si ahora la nueva cruzada pasa por liquidar la rojería en América, ¿a quien buscarán esta vez como socios, a los cárteles de la droga? Algunos de sus capos son verdaderos hombres de Dios, no lo duden.
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Andaba documentándome para escribir una entrada acerca de las querencias de Jose María Aznar por las hamburguesas, confesadas por su propia Esposa, cuando topé con esta foto en Google.
Nintendo DS podría parecer un gesto para recordar su corta edad, pero no se fíen. Seguro que está resolviendo imposibles cálculos matemáticos o perfeccionando su ya fluído inglés.
Tras slogans tan sonados como “Espe jode lo que somos” para Telemadrid o “con fianza” definiendo las municipales del PP, los creativos de publicidad han decidido ahora hundir a la izquierda.
Mientras trato de recuperarme de la honda emoción que me ha causado esta noticia, les dejo con estos proféticos versos, extraidos del repertorio de la tonadillera. 
