miércoles, 4 de mayo de 2011

Sacando brillo al sable real

Sacando brillo al sable
Cierto que una buena boda real puede poner cachond@ a alguna gente. Máxime si la novia eres tu y con este pelotazo resuelves la vida para ti y tus próximas generaciones. Admitamos también que hay quien pierde el oremus ante un tipo con uniforme, aunque sea un portero de hotel. Pero vamos, expresar así tu agradecimiento, de esa manera y en público… un poco fuerte ¿no?

Y demás, hacerlo delante de ese angelito de niña, a quien vemos echarse las manos a la cabeza horrorizada.

En fin, ahora entiendo porqué el padre del novio, el príncipe Carlos, suele ir siempre con faldilla. No es porque le guste transformarse a lo Carmen de Mairena, como muchos piensan. Lo hace para que Camilla lo tenga más fácil a la hora de…

¡Puaj, qué asco!

Impresionante documento de Neil Chelda, visto a través de 1350 gramos, un blog ralamente estupendo.