viernes, 2 de febrero de 2007

¿Despido improcedente?

9-11-m.jpgDespiden a la subdirectora de un psiquiatrico penitenciario por colgar un cartel en su despacho con el lema "ETA-Zapatero-PSOE. Quién está después del 11-M" (Libertad Digital)

Ya sé que muchos de ustedes pensarán que lo mejor hubiera sido dejarla dentro. Aún así, el cese de esta mujer, resoponsable de los servicios médicos de dicho centro, suscita algunas reflexiones.

¿Un excesivo apasionamiento político puede interferir en la ecuanimidad profesional exigible a un alto cargo público? En el caso de los jueces ya vemos que sí y ahí siguen, tan panchos. Pero la duda primordial es:

¿Es lícito despedir a alguien a causa de sus ideas personales, por delirantes que éstas sean?

En este punto, permitan que tenga mis dudas.

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11 comentarios:

  1. Cogiendo con pinzas la noticia que aparece en este periodico de libertad..etc etc...con esa ecuanimidad que lo caracteriza...imparcialidad intachable...y poco dado a los sensacionalismo gubernamentales (sobre todo si el que gobierna es del PSOE), estoy casi convencido de dos cosas. La primera que ha sido la oportunidad que han tenido en el centro para quitarsela de enmedio, seguramente por estar en conflicto con medio centro y segundo que esta de subdirectora no con plaza fija, sino como puesto politico y por tanto no hay problema en levantarle la silla, porque si es subdirectora con plaza fija, de ahi no la echan ni a tiros. No creo que la hayan quitado de ahi por sus convicciones, sino porque estaban hasta el gorro de ella y la verdad que hay que ser un impresentable para tener carteles politicos en un despacho institucional.

    De todas formas por desgracia en este pais, cuando se le quita el puesto a uno sea de la forma que sea, encima le buscan uno con una categoria superior...y sino al tiempo. Asi funciona parte de la administracion

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  2. Estas son las cosas que después les sirven a los liberales de pacotilla para corroborar el apocalipsis que quieren vendernos. No, no estoy de acuerdo con que se despida a esta señora porque además no interfiere en su trabajo el pensar de forma diferente.

    Ahora, tiene gracia que sea precisamente la directora de un psiquiátrico la que abogue por estas ideas. Haberla mantenido en el puesto sería realmente un chiste encarnado por ella misma.

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  3. El diario del Ayatolah hay que depurarlo mucho antes de hacer ninguna consideración sobre sus exclusivas. Aún así, si la noticia es medio cierta, no tengo ningún reparo en posicionarme al lado de la subdirectora, a pesar de que su comportamiento sólo estimule el vomito. A nadie se le debería poner cortapisas a la hora de defender su libertad de expresión; que lo haga a través de un cartel en su despacho es una simple anécdota que demuestra su mal gusto, pero lo esencial es que se respete su forma de entender la realidad.

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  4. Conociendo como funcionan los despidos en la administración, y más si son funcionarios, la veracidad de la noticia la dejo en la nevera. En caso de que fuera puesto político, tendría razón más que suficiente sin necesidad de alegar nada, ya que se basan en la confianza , y si esta se pierde, adios muy buenas.

    Pero si es funcionaria, en 24 horas, a lo más, lo que da es a abrirla expediente sancionador, no a despedirla.

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  5. Y ojo. ¿Sería lícito un cartel alusivo al nazismo en un despacho oficial? No, puesto que el despacho pertenece a la administración y no al titular. No se puede poner lo que le de la real gana a uno en un despacho.

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  6. Imaginemos a alguien que trabaja en en una oficina del Santander.
    ¿Imaginan a un empleado -del nivel que sea- con un cartel en su despacho que rece más o menos:¡Botín, queremos saber la verdad de las cesiones de crédito con las que timaste a medio país, que cuentes la verdad de la pasta que dicen que te embolsas bajo mano!".
    ¿Cuanto creen que duraría? Por si acaso no lo prueben con su jefe.
    Pues bien, el problema es que el jefe de esta señora es el Estado, y dudo que eso sea una práctica admitida en la Administración.
    Claro que, para rizar más el rizo, mi mujer me apunta mientras escribo esto:
    Durante el gobierno de Aznar, un funcionario que colgara en su despacho un poster o luciera una placa bien visible con el "NO A LA GUERRA" ¿Tambien debería ser despedido?.
    Y de nuevo las dudas.

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  7. The lunatics have taken over the asylum. No creo que hay que despedir a alguien por creer que Zapatero puso las bombas del 11-M, pero si hay que buscar un sitio para esa persona donde no puede hacer mucho daño. Me parece que el puesto de 'subdirectora de un psiquiátrico penitenciario' no cumple con ese requisito. Si voy a mi médico y veo este cartel allí, la primera cosa que voy a hacer es intentar cambiar de médico - los presos de esa institución llegan al despacho de la subdirectora y pueden preguntar con razón quien tiene mas contacto con la realidad.

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  8. Yo no creo que sea motivo de despido, sino de sanción en el caso de que no atienda el reclamo de su superior de quitar el cartel. Sólo en el caso de reincidencia patológica podrá darse el caso, no ya por tener el cartel de marras, sino por desobediencia a un superior, que no es lo mismo.

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  9. El problema para los presos es que no pueden elegir de médico. Y su voz no suele ser tenida muy en cuenta. Tambien estoy en la línea de que la posible sanción no vendrá dada por las ideas de esta señora sino por desobediencia reiterada.
    Más escandaloso me parece el tema de esos jueces que, aunque no luzcan símbolos externos, todo el mundo sabe de qué pie cojean y no deudaan en aplicar justicia basándose en sus propos esquemas ideológicos.
    Imaginad que un vecino me denucnia y el juez que instruye el caso, por puro aburrimiento, escribe mi nombre en google y descubre este blog. Si es fiel seguidor de la "mayoría conservadora"... ¡igual me acaba entrullando por el 11.M!
    Total, un rojo menos.

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  10. Está claro que la mujer quería marcharse.

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  11. Bienvenido a est blog, Patxi, aunque me consta que de tanto en tanto miras las fotos :)
    No descarto tu teoría. O que intente convertir su problemática en una excusa para dar el salto mediático. Y es que despues de ver lo de la abuela que ha sido madre a los 67 años vendiendo exclusivas a troche y moche, la verdad, ya me lo creo todo.

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