martes, 17 de octubre de 2006

Entre el golfismo y la golfería.

golf_teto.gifLos campos de golf se han convertido en un reclamo imprescindible para toda urbanización de dudosa recalificación que se precie, desde Murcia hasta Segovia. Pero a quien gusta en realidad el Golf?

Aunque cueste reconocerlo, el golf gusta a mucha más gente de la que imaginamos.

Es el deporte preferido de alcaldes, concejales de urbanismo, responsables autonómicos, constructores, promotores, intermediarios, especuladores, funcionarios sin escrúpulos, contrabandistas y en general de todo aquel que o bien debe deshacerse de un dinero fácil o bien desea embolsárselo con la misma facilidad.

También es una disciplina que entusiasma a los bancos, aunque aquí existe dura pugna entre las entidades nacionales y aquellas establecidas en Gibraltar, Suiza, Luxemburgo o las islas Caimán.

Pero, por extraño que parezca, ilusiona a aquel que con su dinero financia a toda esta panda de facinerosos, endeudándose hasta las cejas para pagar su piso o chalecito en una de esas macrourbanizaciones. ¿Su perfil? Jubilados europeos o “nuevos triunfadores” que, colgándose cuatro palos al hombro, creen haber alcanzado ya el estatus de su jefe.

Ya saben, ruido se sábanas al agitarse y cadenas arrastrándose.

En principio, que los fantasmas deseen agruparse y pasar juntitos el fin de semana no es bueno ni malo. El problema es que, para satisfacer su demanda, nos estamos cargando las pocas reservas naturales que aun nos quedan., ya sean bosques o costas.

¿Por qué diablos estos nuevos pijos no juegan a la petanca, o al mus, o a billar? Se pasa igual de bien y no se precisa tanto espacio. Incluso deportes mucho más elitistas que el golf como el polo o el cricket exigen menos terreno para su ejecución.

O el teto. De hecho, muchos ya estamos jugando, sin saberlo. Y nuestros contrincantes, promotores, políticos y bancos, no son de los que se agachan, precisamente.

9 comentarios:

  1. Ya notaba yo que me escocía el culo desde hacía un tiempo...

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  2. Es increíble como puede haber sinvergüenzas como Camacho promocionando sin ningún tapujo auténticas aberraciones urbanísticas. Tengo familia que vive en Murcia y alguno ha sido huertano y se consideran los primeros perjudicados. Súmese que son urbanizaciones cerradas y relativamente autosuficientes (tienen tiendas de lo más variado, gasolinera incluída)con lo que es falso que creen riqueza en los pueblos cercanos. Item más, muchas de ellas se construyen en secarrales o en antiguas ramblas: lo de Biescas parece que no se ha asentado en la memoria de éstos imbéciles descerebrados. Es para darles una patada en el velo del paladar.
    Cabreados saludos.

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  3. Luego hace falta agua...y una mierda ¡¡¡ ¿con que riegan los campos con el sudor de todos los inmigrantes que explotan por aquellos lares? Y el puto Camacho que pasa que está mosqueao por que no ha llegado a conquistar el Bernabeu... Que se vaya a tocar pelotas a Valdebebas... menudo frente borrascoso se prepara por el Levante-Espanyol, (joder parece un partido de la 1ª división ¿o segunda...? ) entre el Polaris y el Marina d'Or de los cojones...

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  4. Los acmpos de Golf se riegan con agua. No con el sudor de los emigrantes.

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  5. ¡Que mania con dirigir la vida de la gente! ahora a decir a que se puede jugar y a que no. Esto es pecado, esto no es pecado...

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  6. Todo el mundo es libre de jugar a lo que le de la gana, Simón.
    Pero puedo asegurarte a que esta obsesión por construir campos de golf no responde a un aumento espectacular de la demanda sino a la fiebre especulativa de unos pocos.
    De hecho, muchas de estas instalaciones se dan de hostias para conseguir nuevos socios. Cuando algunas de ellas tengan que cerrar el mal ya estará hecho.
    Saludos y bienvenido a esta página.

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  7. Regados con agua??? de dónde de la cuenca del Segura ???? A ver si es que ahora les sobra el agua... a lo mejor acaban llamándose Polaris WaterWorld...o a lo mejor se llaman así pero era algo impronunciable para Camacho???
    Y Simón, por supuesto que todo el mundo puede jugar libremente a lo que quiera...pero que me expliquen dónde está la superdemanda popular que reivindica campos de golf a troche y moche.
    ¿Sabes la de niños que no disponen de un puto pabellón cubierto en su municipio para realizar a resguardo de las inclemencias climatológicas una gran variedad de deportes?
    Quizás con lo que vale un hoyo de un campo de esos se podrían hacer muchas más cosas útiles...pero a quién le interesa? a nadie...o sea que lo tienen muy claro "De hoyo a hoyo...o corres o te......??? Uff Simón casi cometo pecado. Saludos

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  8. Queridos amigos. Como jugador de golf que soy y en representación de una asociación de jugadores puedo decir lo siguiente. En el campo en que actualmente jugamos había literalmente una escombrera, repleta de basuras, desperdicios y suciedad. Un terreno hostil para cualquier forma de vida.El espacio en que se ha construido el campo de golf se ha regenerado creando espacios naturales para las aves, zonas de consolidación de plantas autóctonas y una mejora paisajística importante.
    El campo es de titularidad pública y regado con agua residual al 100%.
    Rogaría que no se generalizase con este asunto ya que hay que considerar muchos aspectos.

    En cuanto al perfil del golfo como decíis te cuanto que soy un trabajador de 30 años casi mileurista. Lo de pijo que comentas es el típico tópico desfasado (eso es lo mismo que pensaba yo). Ahora es muy asequible jugar a esto.

    Poco más. Os invito a todos a probarlo.

    Un saludo.

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  9. Bienvenido a esta página, Giales.

    Agradezco tu punto de vista. Soy consciente de lo que dices. Tengo bastantes amigos que juegan a golf y yo mismo debo reconocer que me inicié en su tiempo con los palos, actividad que tuve que dejar no tanto por mi dudosa capacidad para este deporte -que tambien- sino, sobre todo, por un problema de hernia discal.

    El artículo se refería sobre todo a la especulación inmobiliaria en el que, en muchas ocasiones, se usan los campos como simple reclamo para un tipo de público muy concreto y no siempre golfista.

    De hecho me consta que en alguna de estas urbanizaciones los campos se echan a perder porque sus propietarios -y más con lo duro que se está poniendo el tema hipotecario- no pagan el mantenimiento.

    Saludos.

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